La OTAN fue concebida como una alianza defensiva frente a la amenaza que representó el comunismo a la libertad. Hoy día es utilizada como herramienta ofensiva del globalismo contra los principios de la libertad.
Así como Nicholas Spykman desarrolló su teoría del "perímetro de seguridad" como política de Estado de los Estados Unidos frente a la amenaza Soviética; así mismo reacciona el Estado ruso cuando observa que su espacio vital, su perímetro de seguridad, es presionado y desplazado.
El choque de civilizaciones plantea que para sostener la estabilidad y paz mundial hará falta respetar las fronteras naturales que la cultura y la geografía han dibujado. Es un gravísimo error insistir en "democratizar al mundo", es decir,exportar el modelo democrático occidental
Occidente no puede seguir pretendiendo que su modelo se convierta en modelo universal. Así como tampoco, el resto del mundo puede pretender que occidente sea transformado en un modelo adaptado a costumbres y reglas ajenas a su esencia. Debe haber fronteras y tolerancia.
Los rusos y los chinos deben retroceder a sus áreas naturales de influencia, mientras que occidente debe retroceder a sus fronteras naturales. La OTAN solo tiene sentido como herramienta de defensa y disuasión frente a complejas negociaciones Geopolíticas.
La crisis del Este de Europa pudiese convertirse en una buena oportunidad para que los Geopolíticos pongan cada pieza en el lugar que le corresponde al tablero de juegos. Tablero que los globalistas han enredado en su afán Totalitario.
Los negociadores estadounidenses tienen una buena carta y oportunidad para negociar la retirada rusa de América Latina y el Caribe e incluso de algunas áreas de África. A cambio,respetar el espacio vital ruso en el Este europeo.
Australia, India, y Japón liderar la política de contención a los desacuerdos del régimen de Beijing. Esta estrategia sumaria el interés nacional de los países que componen el Indo-Pacífico, especialmente los que tienen disputas y reclamos territoriales en el mar de China.
En ambos casos el objetivo no es atacar al eje Moscú-Beijing, sino contener desafueros producto de su condición de potencia regional dominante en sus respectivas áreas de influencia.
Tenemos frente a nosotros una propuesta de juego suma-suma para todos los participantes.
Insistir en la política de suma cero y de bloques antagónicos entre las potencias; lejos de proyectar paz y estabilidad global, nos lleva a una ruta de conflicto inevitable, de choque de civilizaciones irremediable.
🇮🇳 🇯🇵 🇷🇺 comprenden bien el juego suma-suma. No así 🇺🇸🇪🇺🇨🇳
Al 🌐🇺🇸🇪🇺, que usa como herramienta Geopolítica a la OTAN; y a 🇨🇳, que usa la trampa de la deuda para fines expansionistas. Ambas políticas deben ser contenidos por la misma razón. Para el segundo caso ya hay respuesta concreta y articulada para tal fin; para el primero Aún no.
Joelvin. R. Villarreal. V
Politólogo.