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| Luis Cabrera. |
Sin duda alguna, queda en
evidencia que la situación económica actual en nuestro país Venezuela es
sumamente grave y que parece ser irrescatable, pero esta vez no hablare de los coletazos
del huracán, a través de este artículo voy hacia el ojo del huracán.
Un huracán cuando va en su
recorrido deja con sus lluvias y vientos graves daños, pero los daños del ojo
del huracán son peores aún, nadie se pregunta “¿de dónde proviene ésta crisis?”.Para mí es obvio que mas allá de los
robos de un estado nefasto, la educación es un epicentro muy interesante a
analizar para solventar tal crisis, hemos visto como el estado opresor a atacado
la educación ideológica y económicamente,que con eficiencia ha logrado golpear
y tergiversar cantidades de cosas, pero a pesar de todo no ha logrado su
objetivo, si nosotros logramos impartir la educación desde las casas, niveles
de preescolar hasta la secundaria, cambiando en gran parte las actitudes o
maneras de pensar para mejor, tendríamos buenas bases.Ahora bien,¿dónde
radica y se sustenta esta crisis?,
en la ignorancia del proceder actual de la juventud viciosa, Venezuela
actualmente cuenta con jóvenes brillantes, excelentes en el ámbito académico,
jóvenes diligentes y trabajadores, pero a pesar de todas estas destrezas la
juventud por su pereza de reaccionar no ataca la raíz del problema, cuando digo
pereza de reaccionar, simplemente es que no piensan para hacer las cosas y se
actúa de cualquier manera, criollamente a las patadas, y he allí los plebeyos
se aprovechan de nuestras bobadas.
He escuchado comentarios que me
sacan de quicio y que son aberrantes ante la moral de muchos que no compartimos
esa idea, ¿cuál idea? esa de hacer las cosas por hacer, en este momento las
universidades atraviesan una crisis enormemente grave la cual yo no acepto,
como estudiante rechazo las condiciones de mi Universidad. Queda claro que el
ojo del huracán está en la Universidad, si hablamos de crisis, al rescatar los atributos
morales que hacen vida en los centros de estudio estaríamos restaurando desde
las bases tal problema que nos afecta a todos, me enfoco en la juventud con
todo el respeto que merecen los profesores, pero esta vez los dejo a un lado.En
la juventud está el futuro de mi nación, y desde la Universidad la podemos
rescatar. LUZ atraviesa por una gran oportunidad de empezar a restaurar las
bases de la Universidad desde cada rincón y en cada facultad. Desplazando a los
dirigentes estudiantiles de siempre, esos que solo se conforman con ver baños
limpios.Estoy seguro que la gran mayoría quiere ver más dirigentes que apoyen la
investigación y la academia,sin dejar aún lado las demás necesidades, pero que
se demuestren con hechos.¿Por qué he de pensar que un requisito para
gobernar en la universidad tanto en los gobiernos y cogobiernos estudiantiles
es tener más de 5 años dentro de la misma y no tener más del quinto semestre aprobado?, es decadente de parte de estos dirigentes.
A ver:¿por qué no hacemos una encuesta
y desnudamos la verdad, que es lo quequeremos todos los estudiantes?
Creo que llego el momento de darles la oportunidad a toda esa juventud que
tenga la capacidad de establecer propuestas que generen verdaderos cambios y
que la Universidad sea el reflejo hermoso de lo que queremos presenciar,
midamos promedios, midamos edades, midamos propuestas sólidas, no propuestas superficiales,
y estoy seguro que el proseguir de los saberes universitarios irá en buen
rumbo.
Para concluir espero no ver para
estas elecciones de gobiernos y cogobiernos estudiantiles las mismas caras de
siempre, llegó el momento de escuchar las propuestas de la nueva dirigencia
estudiantil; la pulcra, la que no está contaminada ni viciada, aquella donde
los futuros colegas no les llaman mafias, así darle más confianza a toda la
comunidad universitaria que se siente desplomada y desesperanzada.
Que todos los estudiantes
puedan vestirse de la armadura para poder salir a luchar con toda la incultura,
ésta representa lo más peligroso del ojo del huracán.
¡Demostrémosle al mundo que aún
estamos a tiempo y que esta situación que atravesamos no es eterna!
